El presidente de la Junta Central Electoral, doctor Julio César Castaños Guzmán, abogó ayer porque los líderes políticos del país firmen un pacto que respalde las reformas de la Ley de Organización Electoral y de la que regirá a los partidos que concurren a elecciones y están en curso en las cámaras legislativas. Reclamó el apoyo de la opinión pública para el cumplimiento de sus labores dirigidas a llevar al país de manera satisfactoria a las elecciones de 2020.
Informó, además, que el organismo electoral está en disposición de aplicar las facultades legales que le permiten establecer límites al accionar partidario. Puede la JCE, y así lo haría, restringir el tiempo de campaña de manera específica, establecer controles sobre el origen de los fondos privados que colecten las organizaciones partidarias y disponer límites al acceso a los medios de promoción para propiciar una igualdad de oportunidades. A algunas infracciones se les podría aplicar el Código Penal.
Antier, la JCE expresó en un comunicado su preocupación por los aprestos electorales extemporáneos que llevan a cabo en estos momentos algunos aspirantes a la presidencia de la República, advirtiendo que tiene “absoluta facultad reglamentaria para impedir la indicada práctica improcedente e inoportuna”.
Al formular su aspiración a que los líderes de los partidos políticos lleguen a un consenso sobre la forma final de los proyectos de ley de orden comicial, Castaños Guzmán se refirió además a los aspectos en los que ha faltado consenso en el Congreso, que son, entre otros: decidir el régimen de convenciones primarias, simultáneas o separadas, y el uso de padrones propios y o el del sistema electoral. Tampoco hay consenso sobre el establecimiento de cuotas para candidaturas femeninas ni sobre las reglas que deben regir con transparencia el empleo de recursos en la lucha electoral.
Castaños habló a directores de medios de comunicación y líderes de opinión en un hotel de Santo Domingo con la participación de los demás miembros de la JCE: Roberto Saladín, Carmen Imbert Brugal, Rosario Graciano de los Santos y Henry Mejía Oviedo. El propósito del encuentro fue “intercambiar ideas sobre diversos temas de relevancia para la Junta Central Electoral”.
Mostró preocupación por la posibilidad de que en los cambios a introducir en el sistema electoral sea aprobada la celebración en una misma fecha y organizadas por la JCE, de las votaciones para elegir candidatos de todos los partidos, creándose una situación compleja y voluminosa cuyos costos superarían a los de las elecciones presidenciales, congresuales y municipales ordinarias, según experiencia vividas en otros países donde se aplica esa fórmula.
Explicó que la JCE dispone de un medio efectivo para aplicar sanciones a quienes no se acojan a sus decisiones reglamentarias.
Recordó al efecto que la Junta es quien administra y canaliza los fondos del erario que por ley deben ser distribuidos entre los partidos políticos reconocidos. Quedó implícito que la entrega de tales recursos podría ser bloqueada o restringida para lograr que las reglas que emita el organismo sean respetadas.
