El nuevo Ministerio Público, investido de plena libertad de actuar con independencia, sólo obediente a la ley y la Constitución, remarcó ayer su norte de trabajo y determinación frente a 326 expedientes de corrupción y otros ilicitos en estado “durmiente” en archivos desde hace 17 años, dejando claro que se agotarán todos los pasos hasta establecer responsabilidades y castigos.
Con esto bajo compromiso con el país, el titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), Wilson Camacho, parece dejar una señal de que aquellos expedientes serán desempolvados y luego esclarecidos para limpiar hechos que han causado vergüenza al país en los ámbitos local e internacional.
Más allá del volumen de páginas con expedientes, muchas con un grueso de casos de corrupción, la determinación de las autoridades abre nuevos capítulos en los que pretenden registrar una historia diferente en el contexto de la justicia, para adecentar su misión, algo que Camacho garantizó ayer cuando dijo se investigará todo para establecer responsabilidades.
El funcionario se refirió a estos asuntos en respuesta al editorial de la edición de ayer de Listín Diario, intitulado “El almacén de la impunidad”, en el que cuestiona el desempeño del ministerio público, al haber mantenido “frisados” en sus archivos 326 expedientes desde hace 17 años.