NUEVA YORK. Nueva York aprobó ayer formalmente la nueva norma que obligará a que en todos los baños individuales de la ciudad se permita el acceso de cualquier persona sin importar su género o identidad sexual, en un intento por terminar con la discriminación contra los transexuales.
Los baños de edificios públicos deberán contener a tal efecto señalización que informe que es accesible por personas de cualquier género, informó la alcaldía en un comunicado.
“Con esta ley, tomamos un nuevo paso adelante para convertirnos en un lugar donde se respeta la dignidad, la libertad y se vive sin miedo a ser juzgado”, señaló el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.
“Cuando los derechos civiles están bajo amenaza en este país, en Nueva York enfatizamos la importancia de la inclusión y la diversidad”, añadió por su parte el miembro del concejo de la ciudad, Corey Johnson.
A partir de ahora los transexuales y las personas con género “no definido” podrán utilizar los baños de acuerdo con su identidad sexual sin necesidad de tener que mostrar una identificación o cualquier otro tipo de prueba que verifique su género.
Las autoridades estiman que en la ciudad de Nueva York viven unos 25.000 transexuales y personas con género “no definido” que llevan años denunciando que son discriminados porque no se les permite usar un baño que no se corresponda con su sexo “original”.
La orden ejecutiva obliga a reportar a las autoridades las medidas adoptadas para cumplir con la nueva normativa.
Otros estados como California también han aprobado leyes similares, mientras que en Carolina del Norte salió adelante una norma que obliga a usar los baños públicos de acuerdo con el sexo indicado en el certificado de nacimiento, para protesta de ONG, colectivos LGTB y el propio gobierno de EE.UU.