Jennifer Domínguez Hernández, la esposa de Pedro Alejandro Castillo Paniagua (Quirinito), no solamente fungió como su garante para lograr que este fuera favorecido con una prisión domiciliaria, sino que fue su abogada en un recurso de revisión de la condena que ratificó la Cámara Penal de la Corte de Apelación de San Cristóbal por 30 años de prisión.
Jennifer y Quirinito se casaron el 22 de febrero de 2016 en la Oficialía del Estado Civil de la Primera Circunscripción del Distrito Nacional, según un extracto del acta de matrimonio del que tiene copia este diario.
Para poder materializar ese acto civil el juez del Tribunal de Ejecución de la Pena de San Cristóbal, Willys de Jesús Núñez, dio la autorización a pesar de que Quirinito ya guardaba prisión en la cárcel de Najayo, ubicada en San Cristóbal.
En el 2010 Quirinito fue condenado a 30 años de prisión por el asesinato del español Gustavo Adolfo Cervantes, una decisión tomada por el Tribunal Colegiado de la Cámara Penal del Juzgado de Primera Instancia de San Cristóbal.
En estos momentos su paradero es un misterio, porque si bien en un acta de defunción se establece que murió en julio pasado afectado de un cáncer en la lengua, todavía no se sabe dónde fueron enterrados sus restos y ningún familiar ha afirmado de manera categórica su deceso.
Quirinito fue trasladado a la cárcel de San Francisco de Macorís y en esa jurisdicción le variaron a prisión domiciliaria por razones de salud, para que recibiera tratamiento médico y estuviera cerca de sus familiares.