El general José Rafael Peña Antonio, exsecretario de las Fuerzas Armadas (FFAA), y el coronel Carlos Piccini Núñez, quien fuera su subalterno, continúan guardando silencio ante las imputaciones que les hace el Ministerio Público en el caso de los Tucano.
Luego de diez meses de investigación de este caso, hay cosas que aún no están muy claras, según la defensa de los imputados.
Con un plazo apremiante de solo dos meses para presentar acto conclusivo sobre la responsabilidad penal que tendrían los dos oficiales retirados y los empresarios Daniel Aquino Méndez y su hijo del mismo nombre, en las transacciones de los US$3.5 millones de sobornos pagados por la aeronáutica brasileña Embraer, el Ministerio Público volvió a interrogar esta semana a los cuatro.
Las mismas preguntas, ninguna respuesta. Perfecto Acosta, abogado de Peña Antonio; Alejandro Tejada Estévez, de Piccini Núñez, y Tony Delgado, de Aquino Méndez y su hijo, cada uno en su oportunidad, aseguraron que dado que las preguntas hechas a sus respectivos clientes fueron las mismas que se les hicieron en el interrogatorio anterior ellos se abstuvieron de declarar.
“Este es un caso que fue declarado complejo y que lleva diez meses de investigación, y en el encuentro de hoy pudimos darnos cuenta de que no existe a este momento del proceso, ningún elemento que comprometa la responsabilidad penal de nuestro representado”, dijo Acosta a su salida del despacho del procurador general, acompañando a Peña Antonio.
Indicó que el exsecretario de las FFAA y exjefe de estado Mayor de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD) no tiene ningún bien ni cuenta bancaria que demuestren enriquecimiento ilícito, y que por lo tanto, todo lo que le imputa el MP “es especulativo”, lo que garantiza que lo de su cliente no va a pasar del proceso investigativo.
Actuación de los 4 en caso. Según un informe del MP, Peña Antonio, primero como jefe Estado Mayor de la FAD en el período 2006-2008; y luego como secretario de las FFAA, período 2008-2010, “fue la persona que dirigió e impulsó” todo lo relativo a las transacciones realizadas en ocasión del soborno internacional practicado por los ejecutivos de Embraer, “canalizando las operaciones ilícitas a través del coronel Carlos Ramón Piccini Núñez (quien era director de Proyectos Especiales de la Fuerza Aérea Dominicana)”.
Agrega que Piccini Núñez, a su vez captaba las empresas perceptoras de los dineros y coordinaba la posterior entrega de los mismos “al senador por la provincia Hermanas Mirabal (Salcedo), Luis René Canaán Rojas, para favorecer la aprobación del préstamo” para la posterior compra de la flotilla de aviones Súper Tucano, que costaron al Estado US$94 millones.
Las indagatorias del MP dominicano, respaldadas por las proporcionadas por el Ministerio Público Fiscal de Brasil, según el informe, “precisan que los sobornos entregados al senador dominicano ascendieron a 3 millones 520 mil dólares”, y que fueron utilizadas tres empresas dominicanas para las transferencias.
Entre esas empresas figura la 4D Business Group, propiedad de Daniel Aquino Méndez y su hijo.