Madrid.– La Audiencia Nacional española celebrará el jueves próximo la vista de extradición a Estados Unidos del “hacker” Stanislav Lísov, detenido el pasado enero en Barcelona y que hace unos días pidió ayuda públicamente al presidente ruso, Vladímir Putin.
“Le pido encarecidamente que intervenga en mi situación, en la injusticia y la arbitrariedad de Estados Unidos hacia un ciudadano ruso. Esta carta es mi última esperanza”, escribía Lísov al mandatario ruso en la carta difundida por la cadena RT.
Sobre la vista de extradición, la Fiscalía española ha informado ya a favor de la entrega y el jueves, expondrá sus razones para apoyar su postura, mientras que la defensa del ruso se opondrá a ella.
En el informe remitido por la Fiscalía a la sección cuarta, al que ha tenido acceso Efe, se apoya la entrega de este ciudadano ruso por delitos de daños informáticos, penados en EEUU con hasta 25 años de prisión.
Lísov, sobre quien recaía una orden de arresto cursada en agosto de 2016 por el Tribunal del Distrito Sur de Nueva York, es sospechoso de desarrollar, distribuir y utilizar, junto a otras personas, el software malicioso NeverQuest.
Con este “malware” conocido como “troyano bancario”, Lísov y el resto de integrantes de la red habrían defraudado 855.000 dólares a instituciones financieras, según indica el fiscal en su escrito.
NeverQuest se instalaba clandestinamente en el ordenador de la víctima y robaba las credenciales de usuario (como nombres de usuario, contraseñas o preguntas de seguridad) cuando el cliente entraba en las páginas web de entidades financieras.