El Procurador General de la República Dominicana Dr. Jean Alan Rodríguez, dirigió un mensaje televisado a la Nación dominicana a través del cual informó que se dejarían fuera del acto conclusivo de acusación, un grupo de personas en su mayoría dirigentes altos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que gobierna en la actualidad. Entre los Beneficiados están: Juan Temístocles Montas, Julio Cesar Valentín y Cesar Segura, miembros del Comité Político del PLD, y quienes representan un porcentaje del Comité Político y a su vez son dueños del país.
A la verdad la investigación se llevó por buen camino en cuanto a la forma como se dice en un buen derecho, sin embargo en cuanto al fondo jamás, pero jamás en la vida, nadie en su sano juicio podrá creer que contra ese grupito de dirigentes del PLD no habían pruebas, por el contrario, las pruebas contra ellos eran sobreabundantes, y quedó demostrado cuando el juez de instrucción especial le impuso medidas a todos, al encontrar según el juez, pruebas buenas y validas que hacían presumir que esos imputados que fueron sometidos a medida de coerción, eran con probabilidad autores o cómplices de un ilícito penal.
El Procurador General de la República Dominicana Dr. Jean Alan Rodríguez, se ha visto envuelto en un problema serio, el de someter a sus propios amigos y compañeros de partido político y aunque el procurador es un joven serio, no pudo soportar esa presión, viéndose obligado a caer en la tentación más fatal que ser humano alguno haya tenido en su vida, cometer una injusticia, al excluir a los dirigentes de su partido y dejar fuera otros culpables de ellos mismos, que manejaron el 80% de los contratos con Odebrecht y que eso es un hecho notorio conocido por la nación en su totalidad y en los ámbitos internacionales.
Otro lado oscuro del resultado de la investigación, es que al parecer el PLD, está dispuesto a desmantelar lo poco que queda del PRM, pues entró en el paquete a todos sus dirigentes altos, dejando fuera a los de ellos, y como dice la sagrada escritura ¨una cosa era necesario hacer, sin dejar de hacer la otra¨.
Desde ya el monstruo sin cabeza de la marcha verde anuncia sus protestas en las calles, y aunque este diario no está de acuerdo con la forma como se maneja la marcha verde, en el fondo hay que reconocerle la razón, ya que quien no reacciona ante las injusticia, no merece vivir.
Ahora no solo quedaron fuera un grupo de ex-funcionarios del PLD, sino que habrá que pedirle disculpas y si fuere necesario el Estado tendrá que pagarle una indemnización por grandiosa ¨honra¨ difamada.
Todo lo que está pasando en el país, es el resultado de la forma irresponsable y cómplice como Hipólito Mejía y Luis Abinader, están manejando el liderazgo de la oposición en confabulación con el gobierno, lo que presenta un panorama tétrico para el país, pues se necesita un líder de masa como Peña Gómez, que en las calles demuestre la rabia y fortaleza del pueblo bravo e incontrolable.
Los funcionarios del PLD, manejaron cientos de millones de dólares del caso Odebrecht y ahí están disfrutando, sin ser investigados ni sometidos y eso es una burla asquerosa insoportable, claro no atribuida al Procurador General, sino a su Partido Político que a precio de compra de conciencia y manejo irregular de la anterior JCE, logró que lo proclamaran ganador del certamen del 2016, con muchas quejas de la supuesta oposición, pero con silencio y cansancio de la misma.
Respuestaprocesal.com.do, lamenta que fueran excluidos y dejados sin investigar un grupo de miembros dirigentes del PLD, que hasta informaron que si recibieron el dinero, pero para campaña y otros admitieron haber visto, estado y navegado en el lodo, pero a decir de ellos, no se ensuciaron, lo que a juicio de cualquier agricultor simple resulta imposible, pues quien se adentra a una finca de arroz, aunque ande con botas que le cubra hasta la cintura, ¨algún chin de lodo le queda¨. Pide a los organismos internacionales, a los países del continente americano y del mundo, venir en ayuda de la nación, pues las cosas que pasan aquí son ya insoportables y al parecer en cualquier momento este sistema de burla hará que explote un problema que será inmanejable.