Siempre ha dicho que la matemática no se equivoca y así ha sido por años, hasta que aparezca una nueva teoría aritmética que varíe esa premisa, y aún no ha aparecido.
Después del 16 de febrero del 2020, en la República Dominicana se sabrá la verdad, porque lejos de las fantasías artificiosas de algunas encuestas pagadas por el seno de gobierno, el día 17 será muy negro para el grupo del palacio, después de ese día, estos entenderán la importancia de la ética, la moral, el respeto a las normas y que las trampas tendrán poco éxito en la población.
Según las estadísticas, desde ya se refleja una perdida casi total, vergonzosa y asquerosa, para el partido de gobierno de la Liberación Dominicana (PLD) y para la Junta Central Electoral (JCE) que ha hecho hasta lo imposible para agradar al gobierno, sin importarle la ley, ni la ciudadanía. Lo cierto es, que después de las elecciones municipales esta nación debe avocarse a una reforma de la ley y si fuere posible de la constitución que sirva para impedir que un partido cualquiera delincuente destruya la esencia y la moral de la República Dominicana, como sucedió en estos últimos años, donde la población terminó adeudada en más de dos veces el presupuesto general de la nación y aun así no paran la feria de préstamos, sin control y sin fiscalización, por la inexistencia de un congreso real, serio e independiente, pues todos esos legisladores son súbditos del dinero que le aporta el Poder Ejecutivo.
Después de las elecciones municipales del 2020, vienen las congresuales y presidenciales, y ahí el gobierno terminará de recibir otra puñalada trapera a corta distancia, que se la propinará el pueblo dominicano, en el centro del corazón del PLD, y terminará de fallecer, como sucedió con el ex Partido Político PRD (que en paz descanse), pues sin importar el monto de dinero que inviertan, su pobre, tonto y tosco candidato alcanzará un sucio y lejano cuarto lugar, quedando por debajo del fracasado y malogrado Partido Reformista Social cristiano (PRSC), ¨que es mucho decir¨, pero es la realidad del sentimiento de la nación, que está harta de ese gobierno, sus abusos, de su forma de gobernar, de su actos de corrupción sin límite y de los atropellos impositivos.
Repuestaprocesal.com.do, lamenta la destrucción del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), pero en cierto modo, lo ve como justo y necesario, pues se trata de una institución política, que con su accionar se ha burlado de la nación, ha pisoteado a los jóvenes y sembrado la falta de moral y protección legal en el pleno territorio nacional, así que;
¡Fuera el autoritarismo, la dictadura y la Corrupción!