Esta semana como a cualquier virgen indelicada, a la podre debilitada y desahuciada Justicia Dominicana, se le vio el refajo, pues la experimentada juez presidenta de la segunda sala de la Cámara Penal de la Suprema Corte de Justicia la Dra. Mirian German Brito le remitió una carta silente, pero devastadora a su par el presidente de la suprema corte de justicia y del consejo del poder judicial el Dr. Marino German Mejía.
La carta se hizo pública y viral, tanto en las redes sociales como en los medios de comunicación, escritos, digitales, radiales y televisivos. En ella la Dra. Mirian German Brito, hace una serie de reflexiones de cosas que a su juicio no le cuadran, dentro del caso ODEBRECHT, pasando de inmediato a realizar una serie de exigencias, como es, el reclamo de que el presidente asuma el liderazgo, control y defensa de los jueces del Poder Judicial y de la integridad del Poder Judicial en sentido general, además exige la jueza una respuesta o postura del presidente de frente a lo que ella denominó, un plan del Ministerio Público Dominicano para agenciarse jueces a su imagen y semejanza.
La magistrada Dra. Mirian German Brito le lanzó un rayo durísimo a su oponente Dr. Marino German Mejía, quedando este traspuesto al recibir el impacto del rayo, sin embargo al volver en sí, luego de despertar y ver su propia realidad, le lanzó centellas, no solo a la magistrada Dra. Mirian German Brito, que lanzó el rayo contra él, sino también contra la Lida. Laura Guerrero Pelletier, directora de la Procuraduría Especializada contra la Corrupción Administrativa (PEPCA).
Los especialistas en Derecho Penal y de Género de inmediato se expresaron sobre la respuesta dada por Dr. Marino German Mejía, a las magistradas Mirian German Brito y Laura Guerrero Pelletier, calificando la respuesta del presidente de la Suprema Corte de Justicia Dominica, como una violación penal, subsumida como violencia verbal y psicología contra la mujer, en virtud de su género, o sea 309-1, del Código Penal Dominicano, modificado por la Ley 24-97.
Por otro lado los especialistas en conducta humana, dígase los psicólogos, no ven la respuesta dada a las magistradas como violencia de género, sino, una reacción de un paciente que sale de estado de Shock, como consecuencia de un impacto inesperado de un tren o cualquier instrumento que al chocarlo produce un daño emocional por necesidad.
Los músicos también han opinado sobre el conflicto internacional judicial que vive la nación Dominicana y desde ya, por el tipo de conflicto, la complejidad del asunto, los involucrados y lo avanzado de la hora para producir una solución efectiva y rápida que sea creíble en la población, le recomiendan al Dr. Marino German Mejía, escuchar la vieja canción de ahora cántate cristiano Leo Dan, esa canción se titula ¨una calle nos separa¨ pero se puede recomponer bajo el titulo ¨una carta nos separa¨
Respuestaprocesal.com.do, lamenta la necesidad que se presentó de tener que enviar la carta al Dr. Marino German Mejía, por parte de la Dra. Mirian German Brito, pide prudencia y equilibrio, pero además, esta es la ocasión más efectiva para que los sectores sensatos de la nación vislumbren la oscura y tétrica situación que a lo interno vive la Suprema Corte de Justicia y el poder judicial, a consecuencia de que los verdaderos jueces dicen sentir dentro de sus órganos un cuerpo extraño, que actúa y responde en contraposición a su buen funcionamiento orgánico lo que a su juicio pudiera producirle la muerte en más o menos tiempo.
Video por: El Nuevo Diario
