Santo Domingo. Mientras el coronavirus ocupa tiempo en prevención y cuidado contra sus contagios y muertes, una mirada más allá de este problema, siguiendo el rastro a la agitación popular contra la corrupción y la llegada de nuevos expedientes al Ministerio Público, citaciones e interrogatorios, se presagia que a la entrada de 2021 esta ofensiva cobrará mayor intensidad frente al flagelo, uno de los peores males que arrastra el país desde hace décadas.
Pasados los períodos de navidad y año nuevo, momentos festivos en la tradición cristiana, se anticipa que los entes que encauzan estos procesos estarán listos para mover la acción pública, con un cúmulo enorme de expedientes a mano, listos para actuar.
Y entretanto el país tiene sus ojos atentos cada día a las novedades de estos eventos, la atención ronda alrededor de dos mujeres que han jurado cortar de cuajo una plaga corrupta que ha causado incalculables daños al país, seguras de que habrá sanciones ejemplares contra sus autores.
Ellas son Miriam Germán Brito, procuradora general de la República, y Yeni Berenice Reynoso, la titular de la Dirección de Persecución, ambas compromisarias de retos enormes que las sitúa ante una prueba de fuego, sirviendo de aliento a una población que espera resultados.
Lo exponen todo
Para esta misión, intensa en acción y riesgosa por su naturaleza, estas dos figuras ponen a prueba su autoridad y se juegan su prestigio, honra y reputación, manteniendo vida la confianza de la gente que repudia la impunidad.
