Brasil: La exmandataria brasileña Dilma Rousseff negó hoy de forma enfática que haya negociado apoyo financiero para campañas electorales con la empresa Odebrecht, como, según versiones de prensa, dijo a la Justicia el expresidente de esa constructora Marcelo Odebrecht.
«Es mentirosa la información de que haya pedido recursos al señor Marcelo Odebrecht o cualquier empresario» para las campañas de 2010 y 2014, en las que fue elegida para gobernar el país, dijo Rousseff en un comunicado divulgado hoy.
La nota es respuesta a unas informaciones obtenidas por la prensa local sobre un testimonio prestado este miércoles por Odebrecht ante autoridades de la justicia electoral, que investigan denuncias sobre financiación irregular para esas campañas.
En ambas elecciones, Rousseff tuvo como compañero de fórmula al actual mandatario Michel Temer, quien asumió el poder en agosto del año pasado tras la destitución de la presidenta por irregularidades en el manejo de los presupuestos.
Según la prensa local, Odebrecht dijo que entregó para la campaña de 2014 la suma de 150 millones de reales (hoy 48,3 millones de dólares) y que al menos una tercera parte del dinero fue negociada con el ahora exministro de Hacienda Guido Mantega, a cambio de unas medidas que favorecían los negocios del grupo.
Parte del total, también de acuerdo a las versiones de prensa, se habría destinado a pagar honorarios del publicista Joao Santana, que dirigió esas campañas, mediante depósitos en bancos del exterior.
En el comunicado, Rousseff rechazó que Mantega haya actuado en su nombre o haya recaudado dinero para sus campañas, lo cual aseguró que fue una responsabilidad exclusiva de los tesoreros del Partido de los Trabajadores (PT).
Rousseff insistió en que la prensa brasileña difunde una versión de la declaración de Odebrecht sobre la que no hay información oficial, pues se mantiene bajo un estricto secreto procesal.
Según la expresidenta, esas informaciones son «filtradas cuando se conocen nuevas sospechas contra los artífices del golpe de 2016», como suele calificar a Temer y al Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), que lidera el actual mandatario.
Rousseff pareció aludir a otras declaraciones que han sido atribuidas a Odebrecht, según con las cuales confirmó que discutió apoyo para las campañas del PMDB en 2014 con el propio Temer, quien entonces presidía esa formación.
Temer ha admitido esas negociaciones, pero dijo que no trató de montos con Odebrecht y aseguró que todas las donaciones recibidas por el PMDB de esa y otras empresas fueron debidamente declaradas a las autoridades electorales.
El presidente insistió en esa versión en un comunicado divulgado hoy, en el que dijo «reiterar lo dicho desde hace meses».
La nota reconoce que durante «una cena» entre Temer y Marcelo Odebrecht se discutió apoyo para campañas del PMDB «pero no se trató sobre valores» y agrega que la formación «recibió 11,3 millones de reales», equivalentes hoy a 3,6 millones de dólares, que «fueron declarados regularmente al Tribunal Superior Electoral».
Esa instancia judicial investiga las supuestas irregularidades en el marco de un proceso que puede llevar a anular la victoria de Rousseff en las elecciones de 2014, por financiación irregular de la campaña.
Las autoridades electorales aún no han definido si una sentencia condenatoria debería ser aplicada también a Temer, en su condición de compañero de fórmula, aunque el actual mandatario sostiene que sus finanzas fueron «debidamente separadas» de las de Rousseff.