El tribunal Colegiado de San Pedro de Macorís sentenció a 5 y 10 años de prisión a dos hombres que fueron acusados de cometer en distintos hechos los delitos de abuso sexual y violencia intrafamiliar.
Luego de acoger como buenas y válidas las pruebas aportadas por el Ministerio Público, el tribunal dictó cinco años de prisión en contra de Darío Nieves (Aris) por agredir físicamente a su expareja y 10 años de reclusión en contra de otro hombre acusado de abusar sexualmente de una sobrina menor de edad, cuyo nombre se omite para proteger la identidad de la víctima.
El tribunal dictó la sentencia condenatoria por la violación del Código Penal Dominicano y el Código para la Protección y los Derechos Fundamentales de los Niños, Niñas y Adolescentes.
La Fiscalía de San Pedro de Macorís, que dirige la magistrada Antonia Idalia Jiménez Estévez, estuvo representada por los fiscales litigantes Claudio Cordero y Olga Lidia Coss, quienes destruyeron la presunción de inocencia de los encartados luego de presentar ante el tribunal diferentes pruebas testimoniales, documentales y periciales con las que demostraron la comisión de los hechos.
Los jueces Kenia del Pilar Tavárez, Juan de la Cruz Güilamo, Haydeliza Ramírez y Cristal Catedral, del Tribunal Colegiado, dictaron las sentencias condenatorias que deberán ser cumplidas en el Centro de Corrección y Rehabilitación de San Pedro de Macorís.
El relación a Nieves, el expediente establece que cometió la agresión contra su expareja el 27 de febrero del pasado año, en el barrio Los Filiú del municipio Consuelo de San Pedro de Macorís. Indica que el hoy condenado agredió a la mujer con un machete en diferentes partes del cuerpo, siendo apresado luego que personas del lugar informaran del caso a la Policía Nacional.
Mientras que con relación al condenado por abusar sexualmente de su sobrina, la acusación señala que cometió el hecho en fecha 4 de septiembre de 2016, a eso de las 12:30 p.m. y que tras ser sorprendido por un familiar de la menor, huyó del lugar, siendo arrestado minutos después por una patrulla de la Policía que prestaba servicio en la zona.