Santiago de Chile. La justicia chilena sentenció hasta con 17 años de cárcel a los líderes de la mayor red de tráfico de migrantes desbaratada en el país, en el último paso de una investigación que se extendió por más de dos años y que involucró a casi un centenar de víctimas.
Un tribunal de la ciudad fronteriza de Arica, en el extremo norte de Chile, dictó su fallo contra los ciudadanos peruanos Soledad Maquera Clavetía (17 años de presidio) y Juan Castillo Vilca (13 años de presidio) por los cargos de asociación ilícita y delitos reiterados de tráfico ilícito de migrantes.
La red, que traficaba migrantes principalmente de origen dominicano, fue desarticulada en 2017, en una investigación liderada por la Fiscalía Regional de Arica y en la que participaron de manera inédita la policía de Chile y Perú.
Los líderes de la banda, en que otros integrantes ya fueron condenados, contactaban principalmente a ciudadanos dominicanos para ofrecer visas y contratos de trabajo asegurados en Chile, una de las naciones con mejor desempeño económico y más estables de la región.
La organización cobraba hasta 3.000 dólares por trasladar a las víctimas, quienes llegaban a Colombia o Ecuador vía aérea. Desde ahí viajaban por tierra hasta Perú, donde la red tenía habilitadas casas para agrupar y hospedar transitoriamente a los migrantes.
Luego la banda trasladaba a las víctimas hacia zonas fronterizas, donde los migrantes eran sometidos a condiciones extremas de altitud o los hacían cruzar de noche por zonas de minas antipersonales para ingresar de manera ilegal a suelo chileno.
En Chile hay 1,1 millón de extranjeros, cifra que representa un 5,9 por ciento de la población residente, según estimaciones oficiales, muy por encima de las 187.008 personas del Censo del 2002, en una muestra del flujo migratorio que se acentuó con fuerza en los últimos años.
