SANTO DOMINGO. En tan solo dos días tres rasos, un exraso y un exmilitar mataron dos personas. Ambos hechos consternaron a la sociedad, y pusieron en tela de juicio la confianza y credibilidad de la Policía Nacional.
En los últimos meses de este año más de 30 agentes policiales y militares, entre estos altos oficiales, han estado relacionados con robos y asesinatos, según una evaluación de publicaciones de medios de comunicación. Muchos de estos han sido cancelados y puestos a disposición de la justicia.
Solo en el caso reciente de la muerte a la joven estudiante de Comunicación Social, Franchesca Lugo Miranda, en un intento de atraco a los hermanos Melvin Darío y Greison Tapia Díaz, con los que se desplazaba por el sector El Cacique, del Distrito Nacional, estuvieron involucrados cuatro hombres que fueron alistados de la uniformada y uno que formó parte del Ejército Nacional.
Este lamentable hecho ocurrió la madrugada del viernes 21. Los rasos dados de baja, a quienes ya se les dictó un año de medida preventiva, son Genao de la Rosa, Emilio Alexander Suaso Suaso y Piña Marte y el exmilitar Jonathan Marmejos Félix.
Al día siguiente, el raso Ricardo Félix del Villar dio muerte a la menor Rosy García. Hace unos días fue cancelado el raso Víctor Emil Estévez Agramonte por participar de un atraco a un taxista junto a un civil en el Ensanche Miraflores.
Mientras que el sargento mayor del Ejército de la República, Rubén Vásquez, mató a un control de la Ruta 24 y otro sargento del cuerpo del orden, identificado como Amaury Cabrera, ultimó a los sindicalistas Overnys Guerrero y Ángel Javier.
En el caso del robo de 370,000 euros, que trajo al país una mujer que llegó por el Aeropuerto Internacional Las Américas (AILA) procedente de Europa, fueron cancelados unos seis miembros de la Policía, entre estos un coronel, dos tenientes, dos mayores, un capitán, un segundo teniente y dos sargentos.
El sargento Jesús Salvador García Almonte, el cabo Bacilio Ventura Portolatín y los rasos Leandro Arleny Ramírez Clase y Diango Burgos Rodríguez, quienes formaban parte de dos unidades de servicio en el Corredor Universitario y el Corredor de la avenida Estrella Sadhala, en Santiago, y fueron detenidos por el caso de unos 17 mil dólares sustraídos a un ciudadano dominicano, durante una actuación policial. Las acciones perpetradas por los agentes del “orden”, han sido condenas por distintos sectores de la sociedad y funcionarios del gobierno, quienes han pedido agilizar el proceso de reforma digital, una depuración en la institución, así como que se regularice mejor el sistema de reclutamiento para los aspirantes a ser uniformados.