Los abogados Cándido Simón y Luz Díaz Rodríguez, calificaron como preocupante el incremento de presos preventivos en las cárceles del país, y favorecieron el uso de dispositivos electrónicos como medida de coerción.
Afirmaron que los brazaletes electrónicos no solo contribuirían a descongestionar los centros penitenciarios donde el 65% de los internos son preventivos, sino también a hacer más efectivas las medidas de coerción, consistentes en arresto domiciliario o impedimento de salidas del país o de un área específica del territorio nacional.
Refirieron que datos recientes ofrecidos por la Procuraduría General de la República destacando que los presos preventivos son el 65% de la población carcelaria, indican que en solo un año el incremento ha sido de un 5%, ya que en el 2016 los internos en las cárceles dominicanas que no habían recibido condena, totalizaban el 60%.
Es menos costoso. Simón recomendó al Estado asumir el servicio a un costo subsidiado, afirmando que la utilización del brazalete siempre será más barato que mantener el imputado en una cárcel.
“En el Distrito Nacional, la colocación del brazalete electrónico ha servido para paliar y controlar a los imputados por violencia doméstica, de género e intrafamiliar”, afirmó Simón.
Agregó que el mismo, junto a las terapias implementadas por la unidad de la Fiscalía del Distrito Nacional, están logrando la reincorporación e integración de familias y parejas en conflictos primarios.
Díaz Rodríguez, de su lado, recordó que el objetivo de una medida de coerción es principalmente asegurar que la persona procesada no se sustraiga al proceso penal, evitar la destrucción de prueba relevante para la investigación y la protección de la víctima y también de testigos.
Agregó que según el Código Procesal Penal (CPP), la prisión preventiva es una medida “excepcional”, o sea, que debe imponerse como último recurso.
“Esta medida resulta de extrema utilidad, tomando en cuenta los fines buscados con su aplicación. De lo que se trata es de maximizar el uso de la tecnología en el ámbito forense, toda vez que estos dispositivos permiten tener un control absoluto -24 horas al día y los 7 días de la semana- sobre la ubicación del procesado”, manifestó.