GUATEMALA. La defensa del expresidente guatemalteco Otto Pérez Molina solicitó a la justicia que le permita ingresar a su celda un televisor, un aparato de sonido, un equipo para realizar ejercicio y una computadora.
Pérez Molina, que alegó que tiene derecho a la recreación, salud y libertad de expresión, también pidió una estufa pequeña y un dispensador de agua pura.
La solicitud presentada por los abogados de Pérez Molina a la cual tuvo acceso The Associated Press asegura que como expresidente tiene derecho a la libertad de expresión y que está interesado en escribir un libro sobre la historia de Guatemala.
Su abogado Moisés Galindo dijo que el ex mandatario “ya está aburrido” de estar en prisión.
El juez decidirá el jueves si acepta o no la petición.
Pérez Molina se encuentra detenido en una prisión civil, dentro de instalaciones de un cuartel militar, acusado por la fiscalía de los delitos de asociación ilícita, cohecho pasivo y defraudación aduanera vinculados a un caso de corrupción.
La ex vicepresidenta Roxana Baldetti, quien también renunció al cargo, está ligada al proceso y detenida, aunque actualmente se encuentra en un hospital militar por problemas de salud.
La fiscalía y la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala acusan a Pérez Molina y a Baldetti de haber recibido varios millones de dólares producto de sobornos.
Según la Comisión los ex funcionarios conocían, facilitaron y recibieron beneficios de la estructura denominada “La línea” integrada por funcionarios y particulares que recibían sobornos de empresarios con el fin de evadir impuestos.
La comisión asegura que Juan Carlos Monzón Rojas, el prófugo exsecretario privado y mano derecha de Baldetti, es el artífice y líder de la estructura. Al menos 100 personas están siendo investigadas por el caso.
Estuardo Salvador González, también detenido e integrante de la estructura, dijo ante el juez a cargo de la causa que Pérez Molina y Baldetti habrían recibido el 50% del total de los sobornos recibidos por la estructura criminal.