Santo Domingo. El jefe de la Policía Nacional, mayor general Nelson Peguero Paredes, el procurador Francisco Domínguez Brito, fiscales de todo el país y otros funcionarios del ámbito judicial acordaron ayer la aplicación de medidas a corto y mediano plazo para enfrentar la creciente criminalidad y delincuencia, regular el fichaje, dar seguimiento a los reincidentes y hacer efectiva la instrumentación de los expedientes.
Básicamente, según explicó anoche el vocero policial, general Máximo Báez Aybar, estuvieron presentes los oficiales que encabezan las dotaciones nacionales y se plantearon soluciones para que se agilicen los casos antes de estos ser presentados ante los tribunales.
También se anunció la conformación de mesas de trabajo entre el ministerio público y la Policía Nacional para identificar a antisociales en sus respectivas zonas e iniciar acciones proactivas para capturarlos y someterlos a la Justicia, así como determinar los casos de reincidencia.
“Identificar a antisociales, quiénes son las personas que constantemente, y de acuerdo a los archivos que tenemos ambas instituciones, se dedican a quebrantar el orden con sus desmanes; igualmente se está trabajando en la modificación de los archivos de la Procuraduría General de la República y la Policía Nacional para una mayor documentación a la hora de buscar a algún investigado”, indicó.
Igualmente, el jefe de la Policía Nacional, mayor general Nelson Peguero Paredes, dispuso que cuando los miembros del cuerpo policial sean citados para comparecer ante denuncias de cometer algún crimen o delito, se obvie la burocracia y que sean referidos con toda celeridad, para terminar con la costumbre de enviarlos a la jefatura y de la jefatura al destacamento donde esté trabajando, y evitar reenvíos y dilaciones en la aplicación de la ley.
“Nos reunimos todos los jefes de los cuerpos de investigación provinciales y todos los fiscales a nivel nacional, los procuradores de corte, trabajando con estrategias a corto y a mediano plazo”, informó el procurador.
La reunión fue realizada en la sede de la Jefatura policial, donde fueron abordados temas como el sicariato (casos viejos sin resolver), el crimen organizado, los secuestros y el consumo de drogas.
