Washington. En una victoria para la administración del presidente Donald Trump, el Tribunal Supremo determinó esta tarde que se puede detener el conteo del Censo antes del tiempo.
La jueza Sonia Sotomayor fue la única que no estuvo de acuerdo con el resto de los jueces al argumentar que le daba miedo que paralizar el proceso podría producir resultados imprecisos, informó CNN.
“Los daños causados por apresurar el conteo del Censo de este año son irreparables”, escribió Sotomayor. “Y los encuestados sufrirán su impacto duradero durante al menos los próximos 10 años”.
El gobierno de Estados Unidos acudió al Supremo porque un tribunal federal había determinado que el Censo, que se realiza cada 10 años, debía continuar hasta el 31 de octubre. No obstante, la administración de Trump argumentaba que esa fecha no le iba a permitir al Departamento de Comercio dar los resultados al presidente el 31 de diciembre.