BERLÍN. Alemania ha recibido durante este año más de 945.000 refugiados, lo que supera en 145.000 el pronóstico que tenía el gobierno para todo 2015, tras un mes récord.
Sólo en noviembre, según informaciones de la policía de fronteras, entraron al país cerca de 190.000 peticionarios de asilo, 10.000 más que en el mes anterior que ya había sido un mes récord.
Los pronósticos del gobierno contaban con que el invierno redujera el flujo de refugiados, lo que, según las últimas cifras, no se ha cumplido.
“No notamos que el mal tiempo tenga efecto alguno”, dijo un portavoz de la policía en Múnich.
Hasta octubre se habían presentado ante la Oficina Federal para la Migración y los Refugiados (BAMF) 330.000 peticiones de asilo y 427.000 personas esperaban turno para hacer su solicitud.
Si esas cifras se suman a los cerca de 190.000 refugiados que entraron al país en noviembre se llega a 947.000 solicitantes de asilo.